La píldora del día después, ¿derecho o barbaridad?

Buenos días a todos/as:
hoy voy a hablaros de la controversia que se ha generado en nuestra sociedad debido a una ley algo polémica que desde el pasado 1 de octubre ha entrado en vigor. Esta ley indica que se podrá dispensar la píldora del día después o abortiva a cualquier persona mayor de 16 años, sin necesidad de que ésta tenga prescripción médica. Además tampoco se exigirá permiso de los padres o tutores, (recordemos que hasta los 18 años se es menor de edad), ya que se sobre entiende que la persona que pide dicha pastillas está plenamente formada y cualificada para saber lo que hace.
Bien amigos, esta ley aprobada por el gobierno con el desacuerdo de partidos de la oposición, en un principio lo que pretende es que en España no haya embarazos no deseados, como ocurre en otros países de Europa.
Vamos a analizar la cuestión en si:
la dichosa pastilla sirve, y no en todos los casos, para evitar la formación de embriones en el útero de la mujer; pero no siempre es efectivo. Lo destacable, es que la sociedad tiene que entender que este no es otro proceso más de anticoncepción como los ya conocidos, preservativo, Diu, parches...etc; sino que es una medida que se toma a última hora y que debe servir para en caso de haber fallado las medidas de prevención y no poder hacer frente a un hipotético embarazo, tomártela y así impedirlo. Recalco que no es medida de prevención, sino un último recurso.
Todos sabemos cómo y de que manera podemos dejar embarazada a una mujer, pero creo que en España, el tema sexual está algo olvidado en las escuelas, ya que la inmensa mayoría de nuestros adolescentes, no son conscientes de los riesgos que conlleva realizar acciones sexuales sin tomar precauciones y ya no solo para evitar embarazos no deseados, sino para prevenir enfermedades de transmisión sexual como el SIDA, (somos el país europeo con mayor tasa), gonorrea, ...etc. Por eso abogo porque a los adolescentes se les facilite toda la información pertinente para que de esta manera no puedan alegar desconocimiento.
Seamos sinceros, la mayoría hemos tenido 13 años en adelante y sabemos lo que conlleva un calentón, pero para evitar hacer tonterías presuponemos que somos responsables.
Dice el gobierno que las mujeres de 16 años en adelante tienen derecho a elegir. Es verdad estoy de acuerdo, pero Sr. Zapatero, ¿acaso no existe el derecho a la vida?. Además igual que tenemos derecho, tenemos obligaciones, y una de ellas creo que es ser responsable de tu actos. Si has sido capaz de tener relaciones sabiendo lo que implica ello, también debes ser capaz de asumir las consecuencias, por favor no seamos demagogos y pensemos que los adolescentes son inocentes; ¡qué saben más que los ratones colorados!
El gobierno se escuda en equipararnos con otros países, (cuándo aprenderá la gente que cada nación es única y no actuamos igual), dice que en Inglaterra los embarazos no deseados han bajado desde que allí entró en vigor la ley hace ya 3 años. No lo dudo, pero ha obviado comentar que sino abortan esas niñas el estado británico les pone un piso con el fin de poder criar al niño. Vale de acuerdo que tampoco es una medida correcta, pero ya que copiamos, ¿por qué no copiar esta medida? Pues porque aquí en España fijo que en vez de disminuir los embarazos, aumentarían, ya que somos diferentes, por eso Sr. Zapatero no hay que comparar.
Derecho dicen que es elegir si o no. Yo creo que es más bien una barbaridad, ya que todos sabemos lo que significa abortar; pero allá cada cual con su conciencia.
Hablando de conciencia, resulta que el gobierno indicó que los farmaceúticos podrían acojerse a objeción de conciencia para no despachar la píldora, pero a día de hoy, (lo sé de buena tinta), los farmaceúticos están obligados a venderla so pena de multa en caso de negarse. Además los famosos trípticos no les llegan a las farmacias.
Derecho dicen, ¿a qué?, ¿a "follar" como locos sin miedo a las consecuencias ya que el Estado nos ampara?, ¿a hacer de nuestra vida sexual un juego que no tenga cabida los consejos paternales?
En fin, que cada uno actue según lo que su educación y conciencia le dicten.
Hasta la próxima:
EL ABUELO.