miércoles, 26 de diciembre de 2007

Exquisitos excesos.(I)

Buenos días a todos/as:
en este artículo voy a escribir sobre la cantidad de excesos que justificamos por estar en la época del año que más hipocresia y que por tanto más falsedad justificado existe: La NAVIDAD.
Exacto en la época en la que nos encontramos inmersos, los excesos están a la orden del día, y por muy curioso que parezca, esos excesos, no los consideramos desproporcionados; aunque ni por asomos los toleraríamos si fueran en otro momento; de hecho nos tildaríamos de locos.
Es curioso, ver hasta que punto una determinada fiesta nos hace cambiar nuestros valores. En la Navidad, es costumbre que la gente se sienta más generosa (hay que lavar nuestras conciencias de todo ele año, jajajaja), y por tanto se incrementa el gasto en los bolsillos y no solo por hacer regalos a los demás; sino que una de las vías donde más gastamos y por tanto sufre nuestro bolsillo es en comer. Efectivamente, la comida es uno de los grandes beneficiados en estas fechas, ya que al parecer los seres humanos somos tan tontos, que solo creemos que debemos comer bien, (langostinos, jamón, buena comida...etc); en esta e´poca y entonces como está justificado, lo que hacemos es atiborrarnos en apenas 10 días de todo aquello que durante el año no lo hacemos. Y lo mejor de todo es que aunque sabemos que es un exceso, lo hacemos de buen agrado, ya que seasmos sinceros, una buena comida no amarga a nadie.
Este bendito exceso, se orihina sobre todo en tres fechas señaladísimas, Nochebuena, Navidad y Fin de Año.
La primera gran comilona y la más esperada en Nochebuena; en este día rompemos los esquemas a los nutricionistas que más de uno se moriría viendo alguna mesa, (la mia seguro), ya que como todo el mundo sabe, las cenas han de ser ligeras, pues ¡¡¡ZAS!!!, justo ese día, lo que se hace es que no se come apenas nada, para cuando llegue la noche, poder homanejear a Jesús, poniéndote cerdo hasta las orejas. Curioso, que para celebrar el nacimiento de Jesús en situación de pobreza absoluta, nosotros lo que hagamos es ostentación de poder culinario, llegando casi al pecado capital de la gula. Pero...; ¡¡¡bendito pecado!!!.
Pero hete aquí que una vez acaba la Nochebuena, apenas nos damos 8 horas de tregua; como quien dice todavía estamos saboreando los langostinos y esas cosas, y mira por donde en la comida de Navidad, ¡¡¡SORPRESA!!!, más manjares y más excesos que aunque tu cuerpo no te lo pida, pues vas tú y a comer más, no vaya a ser que venga época de hambruna y sea la última vez que comes a lo burro, jajaja.
Es aquí cuando a los nutricionistas les sale espuma por la boca y ya no dan crédito, nuestros excesos son latentes pero ahí están. Y que no me vengan con consejos absurdos, que fijo que ellos son los primeros que se ponen hasta el culo, ¡¡dando ejemplo!!, jajajaja.
La Naturaleza es sabia, y como sabe que nuestro cuerpo tiene un límite, nos da una semana de tregua, para que asimilemos lo ingerido y cojamos fuerzas para la última gran comilona del año; la cena de Fin de Año.
En esta cena, como en las demás, además de comer a lo bestia, hemos de tener espacio de reserva para a las 24.00h ingerir 12 uvas, como manda la tradición. Si, además de ponernos tibios a cenar, hemos de comer 12 uvas mientras dan las campanadas, para dar la bienvenida al nuevo año. En honor a la verdad, esta quizás sea la cena que menos nos afecte en cuanto a acumulación de grasas, ya que luego las quemas en las fiestas a las que todo el mundo hasta los 26 años vamos ilusionados, pero que luego preferimos que en vez de fiestas, sean reuniones en casas. Pero algo que choca y que es otro exceso, es ver que en dichas fiestas, a eso de las 4.00h ponen canapes. ¡¡¡¡Manda huevos!!!!, por si no te quedan reservas, una pequeña ayudita.
Ya cuando crees que los excesos con le comienzo del año nuevo sean acabado y dices tus absurdos y nunca cumplidos propositos, (siempre uno de ellos es mantener el físico), ocurre que el día 6 (Reyes Magos), e4l calendario te pone a prueba con otra comilona, que destaca por su postre, Roscón de Reyes, que suele estar buenísimo y que todos comemos con demasía.
Exacvto señores/as, en esta época el exceso culinario es abrumador, pero no conozco a nadie, que se queje por ello, ya que creo que por contra todos deseamos que lleguen estas fechas para llevar a cabo estas comilonas y tener excusa para justificarlas, ya que de otra manera, no las haríamos por mucho que lo deseemos.
Y no voy a entrar en excesos económicos, ya que lo dejaré para la siguiente vez. Como siempre indicar que no pretendo ofender ni convencer a nadie, solo contar Mi Verdad; hasta la próxima:
EL ABUELO.

sábado, 22 de diciembre de 2007

¡¡Esa malvada publicidad!!

Buenas tardes a todos/as:
hoy debido a las fechas tan entrañables de las que gozamos, voy a hablar de un maravilloso acontecimiento qeu cobra si cabe más fuerza en estos días: La PUBLICIDAD.
Exacto la Publicidad, es una compañera que está a lo largo de toda nuestra vida, para bien o para mal, pero que en determinados momentos puntuales del año cobra más protagonismo que nunca. Y efectivamente uno de esos momentos tan extraordinarios es la NAVIDAD, (remito a artículo escrito, para que sepan de su significado), fecha en la cual nuestra amiga la publicidad cobra una importancia desmesurada; ya que su aparición se multiplica por tres o más, que en fechas anteriores.
La publicidad es un arte, en el cual se intenta llamar la atención de un futuro comprador sobre un objeto, idea, ...etc, que se pretende implantar. Esa publicidad suele ser directa, donde un mensaje nos informa sobre las peculiaridades del objeto, y a quien va dirigido y en algunos casos hasta el precio que nos va a costar el daquirirlo.
La publicidad en sí no es mala, pero cuando esa publicidad va dirigida a el ámbito infantil, se convierte en crueldad, ya que en estas fecchas observamos como los anuncios dedicados a los niños, juguetes, pañales, muñecas... etc, suelen tener una punta en escena que luego no tiene nada que ver con la realidad del producto, ya que los avispados (desalmados), publicistas, crean un ambiente en torno al juguete, que es totalmente ficticio, y que aunque es verdad que tienen la decencia (obligados), de advertir que es una reconstrucción ficticia, este mensaje no lo entienden los clientes potenciales (niños), sino los padres y claro cuando intentas explicar a los niños que en el juguete no parecera muchas cosas del anuncio, éstos no lo entienden.
Un claro ejemplo de lo citado lo encontramos en los anuncios de Barbie y Playmobil, anuncios en los cuales los protagonistas están acompañados de decorados preciosos, que nos llaman la atención, pero que en el caso de la Barbie, ni ésta habla, ni baila sola, sino que la tienes que manipular tú; y en caso de Playmobil, ni el agua del barco pirata es tan azul, ni los movimientos de los clicks (creo que se escribe así), son tan divertidos. Pero eso a los señores plubicitas les da igual, ya que ellos su finción es crear la necesidad de poseer el objeto, por encima que después la realidad sea que los niños se decepcionan cuando comprueban que su juguete no es como el que ven en televisión. Y claro tu como padre explica a los niños porque no es igual; imposible. Y no me digan que no es indignante que todos estos juguetes, que son tan atractivos no bajan en el mercado de 60€; que parece que no, pero...
Otro aspecto cobarde de la publicidad, es la alianza que llevan a cabo con personajes más o menos influyentes. Si digo influyentes, porque los señores publicitas aprovechan la imagen de deportistas (con el beneplácito de estos; cobrando claro esta), para publicitar y así dar credibilidad a su producto.
¿Quién acaso, no reconoce haber comprado algún producto, llevado por la imagen de un deportista?. Yo entono el mea culpa ya que soy el primero que compro mracas deportivas que anuncian estos ganchos tan maravillosos, pero que a veces es verdad que son las mejores o por lo menos las que más me duran.
Y es que no hay que dejarnos engañar, la publicidad además de servir para vender, es una fuente de ingresos para estos personajes, que a veces nos resulta casi inmoral creer que por ceder su imagen a un producto, cobran más que sus emolumentos por desempeñar bien o mal (cobran igual), su trabajo.
Efectivamente la revista norteamericana Forbes en su edición de diciembre ha resaltado en sus paginas los 10 deportistas más ricos por ingresos por publicidad y asombra ver que algunos de estos personajes se asoncian con marcas que posiblemente no sean las punteras en su deporte, pero si las más o mejores pagadoras, un claro ejemplpo es Tiger Woods, el golfista número 1 y deportista que más ingresa en publicidad (75.000.000 millones de dolares), y un patrocinador importante es Nike, aunque en el mndo del golf esta compañía no es lider.
Otros deportistas que impresiona que estén en esta lista son Michael Schumacker y Michael Jordan, ya que aunque ambos están retirados, el primero de ellos figura en la tercera posición y el segundo en la decima, merito atribuible, ya que lleva casi más de 10 años retirado. Schumacker solo 2.
Es curioso ya que estos personajes se asocian a estas compañías y llegan a ser santo y simbolo de ellas, Jordan por ejemplo, posee una linea deportiva de prendas y de zapatillas tildada Air Jordan; dentro de Nike.
Es asombrosa la fuerza de la publicidad, que logra cosas que si pensaramos con frialdad no hariamos, pero que en el momento en que nos pica, se convierte en deseo incontrolable; quien se ha hegado a comprar alguna vez una Cocacola, (posee la mejor agende de publicidad del mundo), en verano, en vez de Pepsi u otras, simplemente porque los anuncios de Cocacola son espectaculares. Algunos creemos que Cocacola tiene un sabor especial tmabién, pero realmente no sé si es por la maravillosa publicidad, o por su elaboración.
Lo que si que está claro es que los hombres somos demasiado influibles por la publicidad, que llega a desempeñar un papel fundamental en nuestra vida, llegando a modificar algunas veces (no somos o si conscinetes de ello), nuestra conducta.
De ahí que diga "MALVADA PUBLICIDAD", que juega con nosotros como si fueramos marionetas movidas a la voluntad de las grandes compañias que gastan tantísimo dinero en preocuparse de que sus productos nos invadan en la sociedad.
Último ejemplo de la importancia de la publicidad es el dinero que cuesta un anuncio en eventos como el intermedio de la Superbolw, (mayor acontecimiento publicistico del año), y en menor medida el primer anuncio del año; que curiosamente es el más visto, y siempre suele recaer eses honor en compañias líderes en su cuota de mercado.
Concluyo diciendo que una buena publicidad puede decantar la balanza a nuestro favor, o por contra hundirnos, tan importante es la publicidad en nuestros días que tener buena o mala influye más que el producto sea de buena o mala calidad. Poderosa publicidad, no nos engañes más, pero por supuesto no nos abandones, ya que sin ti no conoceriamos la verdad, jajaja.
Me despido deseando que la publicidad no les tiente a gastar de más en esta Navidad.
Un saludo;
EL ABUELO.

miércoles, 12 de diciembre de 2007

Los profesores, ¡¡PELIGRO!!

Buenas tardes a todos/as:
hoy voy a escribir de algo que me incumbe a mi persona en gran medida, ya que voy a hablar de mi digna profesión, o mejor dicho, de aquellas personas que desempeñan este humilde trabajo.
Los profesores somos aquellas personas que por vocación, es necesaria tenerla, ya que sino al final el trabajo te acaba comiendo y te conviertes en un ser amargado que transmite a sus alumnos esa amargura, se dedica a formar a los pequeños niños, o como dijo en su día Serrat, e "esos locos pequeños bajitos".
Efectivamente, nos encargamos de formarlos, de inculcarles valores que le van a ayudar a lo largo del camino que será extenso que es su vida. No olvidemos, muchos así lo hacen, que la educación, no solo es el colegio, sino que a lo largo de tu vida siempre estás predispuesto a aprender, y de hecho esa actitud de àpertura al aprendizaje es lo que siempre debemos demostrar. Ya que incluso los profesores, nos pasamos toda la vida aprendiendo, ya sea porque salen nuevas leyes educativas, ya sea por nuevos sistemas de enseñanza, ya sea, porque los alumnos nos esnseñan día a día.
Si, a muchos les puede sonar que diga que aprendemos de los niños, pero esa es la pura realidad, todos los días gracias a ellos, descubrimos cosas que habíamos archivado, por considerarlas infantiles y luego cuando ellos nos lo vuelven a descrubrir, nos percatamos que nunca debíamos de haberlo olvidado. Señores/as, los niños son una gran fuente de información, y de enseñanza, ya que en ellos todavía podemos albergar sentimientos puros como la inocencia, humildad, etc.
Señores/as, enseñar implica una gran responsabilidad que por desgracia hoy en día, los estamentos sociales no saben valorar, ya que los profesores estamos considerados como una parte poco importante, cuando resulta que bajo mi opinión (y gracias a Dios de mucha otra gente que no es profesora), los profesores somos demasiad importantes, ya que gracias a nosotros, las nuevas generaciones van a formarse, para ser alguien en el futuro. La importancia capital de nuestra profesión debería de tenerse más en cuenta, ya que cuando la educación impartida es buena, los padres dan por hechjo que es nuestra obligación y lo más lógico es hacerlo bien; y no lo valoran considerando que ellos con su aportación enn casa son los artífices de ese éxito; pero cuando el niño se tuerce, resulta que el gran responsable es el MAESTRO, que no sabe desempeñar sus funciones; curiosamente en este caso la presencia de la influencia paterna-materna no aparece por ningún lado. Cuando la cosa sale mal, nos machacan sin piedad.
Otro apartado es la indefensión que hoy por hoy tenemos los profesores en los centros esducativos, ya que todos vemos (por desgracia ya no es noticia, sino costumbre), que los alumnos pueden insultar e incluso pegar al profesor dentro del centro y éste no puede hacer nada, ya que la ley ampara al alumno por encima del profesor. Parece mentira que el profesor que ha de ser la autoridad en el aula, no pueda ejercerla mediante los instrumentos que tiene a su alcance (castigos, expulsiones), ya que según las leyes actuales, estos metodos pueden y producen traumas a los alumnos. ¡Venga ya señores!, que todos en nuestra vida hemos sido alumnos y sabemos como nos afectaban los castigos, pero de ahí a decir que nos traumaban...
que no cuela. Lo que pasa es que los padres de hoy en día son los primeros que desautorizan al profesor, ya que a las primeras de cambio que el alumno se queja, ya están los padres hablando con el profesor y diciéndoles que a la próxima les denuncian, que si patatín,patatán.
Vamos a ver, seamos serios, los profesores, debemos poder imponer la autoridad pero siempre respetando a los alumnos, pero imponiendo disciplina.
Al parecer los profesores quieren que se instaure al profesor como autoridad pública dentro del aula, con todo lo que lleva implícito dicha autoridad pública. Si finalmente se acepta esta opción, los profesores podremos llevar a cabo nuestro trabajo mejor que ahora.
Voy a acabar ya, porque hay mucha tela que cortar, pero no me quiero alargar; concluyo indicando que los alumnos de hoy en día, están sobreprotegidos, y lo peor es que son conscientes de sus derechos y saben como explotarlos, y es que no hay que olvidar que los niños pueden llegar a ser los más crueles.
Profesores, Maestro, y docentes, ánimo, que fijo que la situación mejorará, y aquellos que seamos vocacionales aguantaremos hasta el final.
Recuerdo que no pretendo convencer a nadie, solo cuento mi Verdad, que en este caso puede COINCIDIR con la realidad.
Hasta pronto:
EL ABUELO.

jueves, 6 de diciembre de 2007

Psicólogos; ganan crédito ante mi.

Buenos días a todos/as:
a continuación voy a escribir sobre los psicólogos, pero antes quiero dejar constancia, que las personas poseemos el don de poder cambiar nuestras opiniones gracias a las experiencias que vivimos.
Hasta este año, cuando se hablaba en mi entorno de la figura del psicólogo; yo era el primero que los despretigiaba, ya que consideraba que el trabajo que desempeña un psicólogo, es solo escuchar y dar consejos, y ciertamente, para ello no hace falt estudiar 4 años, sino ser alguien con una buena capacidad de escuchar y si a ello le sumas dos dedos de frente para poder aconsejar... ¡hay tenemos a un psicólogo!. Esto es lo que equivocadamente creí que era un psicólogo. Pero hete aquí que este año ha pasado algo que me está haciendo cambiar de idea sobre la figura del psicólogo, pero de manera progresiva y paulatina; ya que todavía conservo ideas preconcebidas en mi cabeza, ya saben lo díficil que resulta al ser humano aceoptar que sus ideas no son buenas y correctas, pero en ese cambio estamos; y ese "algo", ha sido comenzar a estudiar Psicopedagogía.
Efectivamente la Psicopedagogía no es lo mismo que la Psicología, pero me ha ayudado a entender muchas cosas que antes creía que eran sencillas y resulta que son mucho más complejas de lo que nos podemos imaginar. Actualmente estudio asignaturas de Psicología que me han abierto los ojos; pero todavía hay muchas barreras que tengo que ver si son capaces de destruir esos conocimientos para poder llegar a confiar y decir que los Psicólogos son algo más que unos charlatanes con mucha jeta, que por oir a los demás y no mojarse, ya que ellos no pueden decir que acción tomar, sino hacer ver que hay posibilidades, cobran un buen monatante de dinero, que además es en el tiempo, ya que un tratamiento por norma general, lleva un período extenso de tiempo.
Si, señores este cambio se ilustro el pasado martes de una manera que me hizo abrir los ojos; ya que me fui con un buen amigo mio, a desayunar a Vips; (hay que mantener la tarjeta de oro), y allí hablando entre muchas otras cosas, surgió mi opinión sobre los psicólogos, y mi amigo, que opina como yo antes de empezar Psicopedagogía; me indico que era gracioso, ver como había cambiado mi opinión al respecto y sobre todo que ahora nuestras conversaciones en torno al tema, adquirirían una nueva dimensión; ya que los puntos de vista son diferentes. Exacto, en esa conversación, me di cuenta que gracias a tener información, (que mala es la ignorancia), mi forma de pensar ha evolucionado, a una pequeña defensa de esta profesión, que es la de Psicólogo.
Pero no crean que he pasado del blanco al negro en tan poco tiempo, todavía piendo que muchos psicólogos, abusan de sus conocimientos, para alargar más de lo debido los procesos de recuperación y así poder lucrarse; ya que a veces, vemos que un tratamiento dura muchos años.
No sabemos si es así porr que tiene que serlo, o por jeta, pero si vemos que la cuenta corriente del psicólogo aumenta día a día.
Pero eso si he de reconocer que la Psicología, una vez que comienzas a conocerla, te atrapa y te demuestra que hay cosas que aunque crees que son de sentido común, tienen una explicación para ser así y esa explicación, te la da la Ciencia de la Psicología.
Así señores/as, concluyo diciendo que de momento, los psocólogos ante mis ojos han ganado un poco de crédito, pero todavía no han llegado a derribar todas mis reticencias, aunque creo que a medida que vaya conociendo más y mejor los entresijos de la Psicología, llegaré a decir que los Psicólogos son un bien social, necesarios para la buena funcionalidad de la sociedad; pero hasta eses momento, seguiré desconfiando y custienándome, (algo que es bueno para el conocimiento, sin poner sabiduría en tela de juicio y ceptando todo como bueno, no se aprende), si amigos psicólogos son o no ustedes unos charlatanes.
Como siempre indico que no pretendo adoctrinara a nadie y ni muchos menos ofender, solo contar mis Gran Verdad.
Hasta la próxima:
EL ABUELO.