La crisis del pepino.

Buenos días a todos/as:
en esta semana ha explotado en Europa la alarma por la bacteria E.coli, que supuestamente se había detectado en los pepinos de producción española. Esta información la destapó Alemania, la cual sin analizar los productos de la huerta española, se atrevió a indicar que eran nuestros pepinos los que estaban infectados, y por consiguiente prohibió su venta en su territorio. Inmediatamente las perdidas para España se hicieron grandes, ya que como siempre que ocurre estas alarmas, los países miembros de la Unión, en vez de estudiar el tema y analizar si la amenaza es cierta o no, lo que hacen e vetar el producto, con lo que conlleva para el país de origen el mal.
Los agricultores de España, inmediatamente han tasado las perdidas en casi 200 millones de euros a la semana, e incluso hay muchas plantaciones que se ven abocadas a la quiebra, ya que sus productos se han visto estancados en cuanto a la exportación y el consumo ha caído en picado debido a la poca confianza de los consumidores.
Desde un principio los agricultores exigieron que se llevara a cabo análisis para verificar las acusaciones, ya que ellos llevan a cabo cada 15 días análisis de la bacteria y nunca han dado positivo. De hecho es tanta la confianza que poseen en sus productos, que han comido en público de ellos y no ha habido ningún caso de intoxicación o muerte.
Aún así Alemania ha seguido con su acusación, hasta que ayer se demostró que había cometido un error de proporciones catastróficas para nuestra agricultura, pero que aún así, han tenido la desfachatez de indicar que ellos han actuado de manera correcta, ya que tenía que detener una epidemia, que curiosamente no viene el origen del país al cual ellos han acusado.
Pero lo más sorprendente es que los miembros de la unión, que supuestamente han de velar por los valores de un miembro de dicha unión, en vez de criticar la acción de Alemania, les ha apoyado ya que no es lo mismo el poder y pero específico del país germano que el que en la actualidad poseemos los españoles.
Pero lo más importante es saber que hará nuestro gobierno, ya que fijo que si hubiera sido a la inversa la acusación, los alemanes estarían exigiendo daños morales y que les pagásemos las perdidas ocasionadas, pero en cambio nosotros, ni nos planteamos hacer nada, ya que como somos un país turístico y dependemos de los turistas alemanes e ingleses, lo que haremos será exigir rectificación pública, pero claro con las rectificaciones no se van a dar de comer a los damnificados, que son muchos y que han perdido gran parte de sus cosechas y de su sustento. Pero claro, el gobierno considera que es más importante que los germanos y anglosajones se acerquen a nuestras costas en verano y se dejen unos pocos euros, y sobre todo den una imagen lamentable, a tener el valor de vetar algún producto alemán, ya que si hipotéticamente lo hiciéramos, fijo que Bruselas nos sancionaría, pero en cambio ellos,... salen con las manos limpias.
Como siempre en las grandes crisis europeas salen a relucir el papel de los miembros pertenecientes y España se encuentra en el furgón de cola.
Pero luego a la hora de aportar euros para ayudar a Portugal, Grecia, se nos exije la aportación de un país grande, que sinceramente no lo somos.
Pero esto es lo que el Sr Zapatero y su gobierno nos ha condenado a ser, y encima se sienten orgullosos del papel que desempeñamos.
Como siempre solo he tratado de contar mi verdad.
Hasta la próxima:
EL ABUELO.