Buenos días a todos/as:
ayer mediante los medios de comunicación, en especial las televisiones nos enteramos que Alemania, sigue sin rectificar sobre la falsa noticia que vertió sobre nuestros pepinos, a los cuales acusó de ser el causante del mortal brote de E.coli, que está asolando el país germano. De hecho para más mosqueó de nuestros agricultores, volvió a indicar que actuó correctamente al alertar sobre este producto y además dejó entrever que los análisis que han demostrado que no existe tal peligro en los pepinos, no son del todo concluyentes, con lo cual a vuelto a sembrar el pánico en el sector agrícola, ya de por si muy dañado.
Lo peor de todo es que aunque las propias autoridades alemanas han dado por supuesto que el foco de la bacteria procede del propio país, incluso se sospecha de un restaurante de la Baja Sajonia que ha presentado 17 casos de infectados, y la mayoría independientes entre si. Por si no fuera esto significativo, la segunda revista con tirada en Alemania, también deja en el aire que el foco se pudo producir en el puerto, ya que justo una semana antes de los casos, (tiempo de incubación de la bacteria), se celebró una fiesta y se consumió hortalizas, lavadas allí. Y justo después de la semana, comenzaron los casos de infectados.
Pues bien, aunque todo indica que la bacteria está focalizada en Alemania, todavía la lumbreras de turno alemana, niega los hechos y es capaz de decir que no se arrepiente de lo dicho en su día, e incluso indica que lo hizo correctamente y que en ningún momento Alemania debe ni de indemnizar a España, ni por supuesto pedir excusas.
Una vez más queda de manifiesto que los alemanes son un poco soberbios, y que en ningún momento son capaces de reconocer sus errores, recordando actuaciones del pasado que le llevaron a cometer errores tan importantes como la II Guerra Mundial. Por supuesto que lo de ahora no se puede comparar con semejante suceso, pero si que es cierto, que el carácter alemán queda reflejado en mal lugar debido a este tipo de personalidades públicas que en vez de tener la humildad de reconocer sus errores, se reafirman en ellos, lo cual es dañino para el país que representan.
De todas formas, esperemos que ahora si nuestro gobierno actué con contundencia, ya que con las declaraciones de dicha portavoz, se ha vuelto a dañar la ya precaria imagen de nuestra agricultura, la cual está siendo vetada en diversos países que tradicionalmente eran beneficiosos para nosotros como EEUU, o Qatar.
Pero mucho me temo, que al final, España no hará nada para compensar este agravio, e incluso tomará medidas preventivas contra las acciones espontáneas que han surgido en nuestro país para boicotear los productos de origen alemán. Y es que ya se sabe que Alemania tiene más poder en Europa que nosotros, y de ahí que nos tomen por el pito del sereno.
Dejaremos un tiempo prudencial para que nuestros "incompetentes representantes" oficialicen una queja con consecuencias.
Hasta la próxima:
EL ABUELO.
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