sábado, 31 de marzo de 2007

La Familia Política

Buenas tardes amigos/as:
veo que el otro día colgué un artículo que tuvo que estar muy bien, ya que versaba, sobre el olvido y por lo que veo, nadie se ha acordado de escribir comentarios; ¡¡¡si que fue efectivo!!!jajajaja.

Buenas tardes amigos/as:
Hoy voy a hablar de un tema que siempre da que hablar para bien o para mal, y que nunca se pasará de moda: La familia política. ¡Esa familia que siempre hemos deseado tener!
La familia política, va asignada a tu pareja. ¿Qué quiere esto decir? Pues señores, con esto quiero decir que tú no eres dueño de esa elección, sino que en el momento que decides crear tu propia familia con tu mujer, resulta que ya la tienes de antemano, ya que además de tu esposa, adquieres: cuñados/as, y la no por consabida, temida figura de la SUEGRA.
Por norma general, la familia política ha de caerte bien, ya que son esas personas que han compartido su vida con tu mujer y ya por ello has de sentirte agradecido, pero hete aquí, que no siempre sucede que compartas esa afinidad, sino que por el contrario, puede que no la soportes.
En este caso, (muy elevado porcentaje), la verdad es que esa familia política se convierte en un escollo bastante complicado de superar, ya que por un lado son los parientes directos de tu esposa y claro está, no le puedes ofender a ella diciendo que no quieres contacto con ellos. Por el contrario cuando estás con ellos eres capaz de observar esos “pequeños detalles” que no soportas y claro llega un momento en que tu capacidad llega al límite y buscas cualquier excusa para librarte de ellos; como por ejemplo acabar la reunión, excusándote con poner la lavadora y tender la ropa. Que no digo que no sea cierto, pero lo que realmente deseas es quitarte de en medio, y esa tarea que tanto odias, (la lavadora), pasa a ser tu fiel aliada y mejor escudera.
Si desgranamos uno a uno los miembros de la familia política, siempre podremos salvar en el peor de los casos a alguien.
Los cuñados/as--- son los hermanos de tu mujer o marido, y por norma general suelen ser personas que chocan contigo, ya que al principio como les molesta que tú hables de su hermana/o, como si supieses más que ellos. Realmente tienen razón en que ellos saben más de tu pareja, (para algo son familiares), pero en según que ámbitos tú eres la persona más adecuada. Esa animadversación suele acabar cuando se dan cuenta que tu mujer te prioriza sobre ellos; y que ella es feliz a tu lado. Aunque hay veces que siempre está latente y esperan un mal momento para “ayudarte” a finalizar.
La suegra/o--- curioso personaje este. Habitualmente el peor parado es la suegra, ya que por norma general el suegro es más decorativo. La suegra es la “encantadora” madre de tu mujer. Al principio de la relación es todo sonrisas y simpatías. Si hasta parece que esté alegre de que si hijo/a haya encontrado alguien. Pero…, con el paso de los días comienza la METAMORFOSIS, la sonrisa sincera, se convierte en sonrisa falsa y malintencionada. Donde antes era todo comprensión, ahora es todo escollos, cuando antes eras “ese hijo”, ahora eres “ese” que se ha casado con tu preciosa hija, o que se va a casar, y que se la has arrebatado.
La verdad, a veces, las suegras son egoístas y piensan más en su interés que en el de sus hijos. Y es que a veces no aceptan que los hijos han de vivir su propia vida y no la que ellas no pudieron vivir y hubieran deseado vivir.
Suegros, suegras, dejen vivir a sus hijos/as, y dejen que comentan sus errores, ya que eso les hará más fuertes y sabios. ¡Recuerden los errores de unos, nos hacen más fuertes!
Consuegros--- relación que establecen los correspondientes suegras de cada cónyuge. Esta relación, es la más falsa de todas las posibles en la familia política. Ya que ambas madres ven la una en la otra, esa mujer que ha concebido al hombre o mujer que les ha robado a “su niño/a”. Y claro, ¡ESO NO SE PERDONA! Pero como si de un marcaje se tratase, suelen fingir la una y la otra que están contentas con la relación que mantienen sus hijos.
Lo más preocupante de la familia política, es que siempre intentamos convencernos que son buena gente y con el fin de llevarnos bien organizamos actos en conjunto. Lo mejor de esas ocasiones ¡sin duda!, es cuando finalizan y pensamos: esperemos que pasen cuatro o cinco meses para repetirlo. Pero curiosamente cuando llega la hora de despedirnos, solemos decir: ojalá lo repitamos muy pronto. ¡SEREMOS FALSOS!
Para acabar, os recuerdo una frase que me dijo un buen amigo: “si queremos saber como será nuestra mujer de mayor, sólo a tu suegra has de ver”. Pues amigos/as, si eso es cierto, ¡menudo futuro!, ya que sino soportamos a nuestra suegra…
Como siempre recalco que con este artículo no he pretendido ofender a nadie y si alguien se ha dado por aludido/a, ruego me perdone. Hasta la próxima semana, vuestro amigo/a:
El Abuelo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Saludos!

De familias políticas no puedo hablar mucho ya que no tengo tanta experiencia en el tema, pero puesto que soy familia política de alguien, daré el punto de vista opuesto.

Yo soy familia política de todos los maridos y esposas de mis primos y primas. Bien es verdad que entre primos en mi familia hay una sensación de clan, de unidad, que hay que tener en cuenta para ver mi enfoque. Entonces tenemos que a una reunión familiar viene la pareja y lo primero (somos un poco brutos) es que le caen todas al nuevo. El sentido del humor es muy importante y ya apunté que somos brutos, pero no malos. Y luego hay que ver la conducta del familiar "alienado". Si no ha cambiado mucho y sigue siendo "familia". Hemos tenido de todo, y la mayoría están perfectamente y siguen con mis primos. Creo que al fin y al cabo (y en mi caso particular) la cuestión es si la familia, "el clan", acepta un nuevo miembro, se siente cómodo con él, y viceversa.

De relaciones entre tíos, suegros, y cuñados ya sé decir menos, porque mi familia es muy rara y estoy en otra franja de edad. Así que sólo me queda desear tener una suegra maravillosa.

¡Hasta pronto!

El Abuelo dijo...

Desperillado;
nunca hay suegras encantadoras, lo son hasta que ven que su niña puede alejarse de su lado, es en ese instante cuando cambian y de ser encantadoras, pasan a se SUEGRAS. Así que aplicate el cuento chato.