Buenas tardes a todos/as:
hace dos días acabaron en la localidad madrileña de San Sebastián de los Reyes su fiestas, que son conocidas de forma popular como la Pamplona chica, debido a su similitud con la fiesta de San Fermín.
La verdad es que conozco ambas fiestas y he de decir que las similitudes entre ambas son importantes en cuanto al tema de los encierros, ya que en Sanse corren bastantes corredores que lo han hecho previamente en Pamplona, y que son ellos mismos quienes comentan que los encierros son bastante similares pero indudablemente el recorrido de Pamplona es bastante mejor y más largo. Pero en el momento en que acaban los encierros se acaban las similitudes; ya que después los festejos que acompañan a ambas fiestas distan mucho de ser similares; ya que mientras en Pamplona el presupuesto de las fiestas es enorme, recordar que duran una semana y que paralizan la ciudad, provocando que su población sea triplicada. Llega a ser tantas las personas que se acercan a Pamplona que la oferta hotelera se queda corta e incluso hay gente que acaba durmiendo en parques y coches.
La verdad es que en Pamplona la fiesta está más dirigida a el beber y disfrutar de la compañía de los amigos a todas horas sin tener en cuenta las consecuencias de tanta ingesta de alcohol. Y es que hay que indicar que la fiesta de Pamplona es más internacional e incluso vienen muchos jóvenes del resto del mundo, en concreto de los EEUU, ya que no hay que olvidar que Ernest Hemingway fue un amante de la fiesta y la publicitó bastante en sus libros.
En cambio las fiestas de Sanse, son bastante más familiares, en principio porque aunque son conocidas como la Pamplona Chica, no son ni mucho menos tan internacionales, y por supuesto no cuentan con el presupuesto del que gozan las originales. De hecho, las fiestas de Sanse se llevan a cabo en el recinto ferial de la localidad que no es muy grande, y en dicho recinto, se ubican muchas atracciones mecánicas, y muchos puestos de comida. De ahí que sean propicias dichas fiestas para ir toda la familia a disfrutar de un rato.
Además las fietas de Sanse incluso cuentan con actuaciones musicales tanto para mayoría es como para menores, y para colofón final, las fiestas de Sanse cierran con fuegos artificiales que a todo el mundo suele gustar.
Justo en la despedida encontramos la otra similitud con Pamplona, ya que si en Pamplona se canta el Pobre de mí, y desde ese mismo momento se pone el reloj a descontar los minutos para el año que viene; en Sanse se canta el Que pena me da que se acaban las fiestas de San Sebastián.
Ambas canciones son iguales, ya que utilizan la misma base, pero si bien es cierto que el Pobre de mí es multitudinario y famoso, el Que pena me da...; es más bien cutre y bastante insignificante, ya que mientras que se oficia en la plaza del ayuntamiento; las fiesta en el recinto ferial alejada de la plaza está en pleno apogeo aprovechando sus últimas horas. De ahí que no sea tan relevante la canción.
Si bien, es cierto que en Sanse al acabar también indican que se ponen a trabajar desde ese momento para que el próximo año las fiestas vuelvan a la localidad.
Por cierto lamentable que el alcalde de Sanse aprovechase el discurso de despedida para mandar mensajes indirectos de carácter político a la oposición; y sobre todo achicar balones sobre el presupuesto de las fiestas.
Es cierto que el presupuesto se ha reducido sensiblemente, se aprecia sobre todo en los fuegos, que han pasado de ser de 15 minutos a 2 minutos. Este año incluso los fuegos se lanzaron desde el propio ayuntamiento y fueron caóticos e incluso peligrosos, ya que los residuos de los pertados cayeron sobre la gente que en vez de mirar el espectáculo, huían para que no les cayera encima y les produjeran quemaduras.
Señor alcalde, una cosa es justificarse con la reducción del presupuesto; y otra cosa es la mala organización y la escasez; ya que todos indicaron que para ver semejantes fuegos, 2 minutos; cuando la gente llevaba esperando cerca de 30m; fueron lamentables e incluso hubiera sido preferible no haberlos hecho; pero... es más importante llevarlos a cabo y luego achacar su fracaso al partido de la oposición por haber reducido gastos.
Efectivamente Sense es la Pamplona Chica, pero no por su semejanza de encierros, sino por el abismo enorme que hay de presupuestos entre ambas fiestas. Y es que no hay que olvidar que mientras las originales, Pamplona, son fiestas Internacionales la otra Sanse; son fiestas pequeñas pero al fin y al cabo fiestas de una localidad pequeña de Madrid que su fama no llega a ser ni un tercio de lo que son San Fermín.
Con este artículo no quiero desprestigiar las fiestas de Sanse, de las cuales soy asiduo y me lo paso genial; pero he de reconocer que el apodo de La Pamplona Chica les queda algo grande. Pero recalcar que son de carácter familiar y mucho más cívicas que las de Pamplona.
Pero ni de largo se pueden comparar como ellos pretende, ya que Pamplona esta a años luz.
Como siempre solo he tratado de contar mi verdad, que no tiene porque ser compartida, pero que yo ejerciendo mi libertad de expresión decido contarlo aquí.
Hasta la próxima:
EL ABUELO.
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