Buenas tardes amigos/as:
hoy voy a escribiros sobre un tema que me pone bastante furioso, ya que juegan con nuestras ilusiones y con nuestro dinero, y eso duele mucho. Y me refiero a la calidad de los hoteles, que a veces parece que quien les da las estrellas deben estar fumados cuando llevan a acabo su inspección, ya que hay hoteles de 4 estrellas, en los que yo he estado, que son lamentables y que como mucho deberían tener 2 o menos estrellas.
Recientemente he pasado 5 días en Marbella, en el Hotel Rincón Andaluz, que me lo vendieron como un hotel de 4 estrellas, ya que por sus instalaciones así lo merece, ya que posee, 3 restaurantes, un salón para ver acontecimientos deportivos, jardines bastante amplios, 2 piscinas, y lo más importante para tomar la decisión de ir, un acceso a la playa, que es de hierba y que solo para los clientes dispone de tumbonas y sombrillas por un coste adicional de 4 euros desde las 10.00h a las 19.00h. Por supuesto las habitaciones las hay de diversos precios y de diversas comodidades.
El régimen de alojamiento podía ser solo desayuno, o media pensión, que incluía desayuno y cena. Esta fue la opción que nosotros elegimos.
Hasta aquí todos podemos pensar que dicho hotel se ajusta a las 4 estrellas, pero ahora verán porqué no fue así. Lo primero que nos encontramos, (esto no es achacable a ellos, pero deberían informar al menos), es que la carretera de acceso al hotel, la antigua carretera de Marbella, se encuentra en obras y el acceso al hotel es bastante compleja. Además te venden el hotel como en Marbella, (ciertamente lo está por escasos 100 metros), pero está más cerca de San Pedro de Alcantará, a 100m.
Una vez que llegamos a aparcar en el parking, que lo venden como privado y no es cierto, ya que es una calle, que si bien está lleno de coches de gente del hotel, está a la vista de cualquiera que pase por allí. Fuimos a la recepción y allí nos atendió un recepcionista bastante seco, que nos adjudicó la habitación, que estaba en la segunda planta. La sorpresa fue, que no hay botones que te lleve la maleta a la habitación, que si uno es joven y no le importa llevar peso, no pasa nada, pero si tus condiciones no son las adecuadas, la verdad, te cuesta llevarla. Además por lo que cobran, que menos que haya un botones.
Una vez que nos asentamos en la habitación y deshicimos la maleta, la sorpresa saltó en el baño, ya que mi acompañante, que para eso es una impresionante detective, descubrió que el baño no estaba limpio, e incluso la taza del váter estaba algo sucia. Ante esto, recurrimos a recepción, los cuales nos mandaron una chica para que limpiase en profundidad. Mientras nosotros estábamos en la piscina.
Parecía que ya una vez subimos de la piscina todo estaba correcto y ya empezábamos a disfrutar, cuando decidí antes de cenar poner el aire acondicionado, ya que allí los 35 grados era fácil sufrirlos. Pues la decepción fue que no funcionaba el aire. Llamamos por segunda vez en el día a recepción y nos dijeron que cenásemos tranquilos que a la vuelta ya estaría solventado el problema.
Pero como todos os imaginais, al llegar de cenar, el calor era insufrible y no había posibilidad de poner aire. Como yo soy muy caluroso, decidí ir en persona a recepción con mi acompañante y allí nos plantamos, o nos daban una solución al aire, o la montábamos. Al final, decidieron darnos una habitación con nuestras mismas características, pero más grande, ya que no les quedaban de nuestro tamaño. Creeréis que salimos ganando, pero no fue así, ya que en la anterior teníamos cama de matrimonio y en esta no. Además dicen que el hombre es el único animal que tropieza en la misma piedra 2 veces, y es verdad, ya que el baño de esta habitación estaba peor que el anterior, con uñas por el suelo, pelos en el váter y bastante suciedad. Eran las 23.00h y llamé por 4ª vez, bastante molesto para que nos mandaran a una chica de limpieza. Su excusa fue comentar que estaban saturados de gente y que al tener que dar las habitaciones rápido, pasaba que la limpieza no era muy buena. ¡Tocate los pies!, la escusa era lamentable, pero... nos limpiaron a fondo el baño.
Cuando ya agotados nos acostamos, y creíamos que ya había acabado el calvario, resulta que estaba la habitación plagada de mosquitos. Estaba tan cansado que decidí aguantar esa noche y descansar.
Al día siguiente les comenté que nos quedábamos en la habitación, pero que por favor echaran matamosquitos.
Al final efectivamente a la noche siguiente a las 4.30h tuve que ir a recepción a por un matamosquitos, que me quedé para toda nuestra estancia.
Por lo demás tanto la comida, como los otros servicios eran normales, e incluso en la media pensión no entraban las bebidas de la cena, cosa que no molestó, pero si llamó la atención.
Además la amabilidad de las camareras/os dejaba bastante que desear.
Pues bien después de lo aquí escrito, uno se debe preguntar, ¿cuándo un hotel debería perder la categoría asignada? Ciertamente os digo que este hotel en cuestión Hotel Rincón Andaluz, debería como mucho poseer 2 estrellas, y debería pasar revisiones que certificaran que son capaces de mantenerlas.
A parte de esto, pasamos unas buenas mini-vacaciones, ya que el tiempo acompañó, (salvo un día), y lo más importante la compañía hizo de un viaje pasable, algo maravilloso.
Como siempre solo he contado mi Verdad, que por lo visto en los comentarios de valoración del hotel, coincide con muchos usuarios.
Hasta pronto:
EL ABUELO.
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