Evo Morales, los marinconzones, el pollo y los calvos cabrones.

Buenas tardes a todos/as:
hoy amigos/as voy a escribir sobre las declaraciones que en su día llevó a cabo el presidente de Bolivia, que levantaron un gran revuelo y sobre todo avivaron la polémica ya que no dejaron a nadie indiferente. Las declaraciones son las que a continuación represento literalmente:
"El pollo que comemos está cargado de hormonas femeninas. Por eso cuando los hombres comen esos pollos tienen desviaciones en su ser como hombres". Y no contento con soltar esta primera perla, nos dedicó esta segunda que tampoco tiene desperdicio:
"La calvicie, que parece normal, es una enfermedad en Europa, casi todos son calvos. Y es por las cosas que comen. Mientras en los pueblos indígenas no hay calvos, porque comemos otras cosas".
Como es lógico enseguida las reacciones surgieron a sus palabras y hay que decir que la mayoría fueron feroces críticas, sobre todo desde los colectivos gays y lesbianas, y sobre los productores de ganado avícola, ya que en ningún momento las palabras del Sr. Evo Morales, se fundamentan en un hecho científico, sino que son dichas gratuitamente desde la supina ignorancia, que como siempre acompaña a dicho personaje.
Pero, vayamos por partes. Inmediatamente a sus declaraciones del pollo, se catalogaron estas, como discriminatorias frente a las personas gays y lesbianas, ya que cada uno tiene derecho a elegir su tendencia sexual, estemos o no de acuerdo con ella, pero eso sí, debemos respetarla. En ningún momento Evo Morales ha respetado a estos colectivos, ya que ha insinuado que la homosexualidad, además de estar provocada por la ingestión del pollo europeo, (¿acaso Bolivia está exenta de gays, lesbianas, o como dice él, de mariconzones?), es una enfermedad que se puede adquirir. Vamos a ver Evo Morales, la homosexualidad no está catalogada como una enfermedad, sino que es una opción que el hombre o mujer escoge libremente según sus gustos; y por supuesto la ingesta de un determinado alimento no puede provocar que un heterosexual se convierta en homosexual. Así que dejé de decir chorradas que quizás en su país sus conciudadanos se las traguen, pero tenga en cuenta que en el resto del mundo, la cultura es más extensa y sabemos qué es la homosexualidd y la hemos aceptado como un derecho a elección de la persona, estemos o no de acuerdo, que ese es ya otro tema.
Pero lo más increíble de toso es que no solo Evo se ha quedado a gusto al decir lo del pollo y la homosexualidad, sino que en otro alarde de sabiduría sin fundamento científico, se ha atrevido a indicar que en Europa la mayoría de los habitantes somos calvos debido a nuestra alimentación.
Mister Lumbreras, has de saber que la dieta mediterránea, está calificada como un de las más saludables y más completa del mundo, por no decir la más, y que por supuesto dista un abismo entre la calidad de los alimentos que Europa consume, frente a los de Bolivia, que se nos antojan que no pasarían los controles de calidad que pasan nuestros alimentos. Pero para ejemplificar sus estúpidas declaraciones, Evo acompañó estas palabras enseñando su pelo que al parecer él cree que es bonito y sano.
Sobre gustos los colores, pero el pelo del sr Evo parece más bien un pelo lamido por un animal, ya que lo tiene pegado a esa cabeza que Dios le ha dado, al parecer solo para lucir su "bonito" pelo, ya que de inteligencia, le pasa como a Homer, que Dios le ha dejado una nota indicándole que le debe un cerebro.
No digo estas palabras gratuitamente, sino que al igual que Morales ha indicado que los calvos son personas con malos sentimientos, incluso les ha calificado de cabrones, yo me atrevo a decir que los indígenas, como muy bien se ha calificado él mismo, son unos desagradecidos, ya que tendrían que hacer una retrospección en el tiempo y darse cuenta que sino fuera por los europeos, en especial los españoles, estos señores todavía irían en taparrabos y con las lanzas. De hecho si miramos el día que fue proclamado presidente Evo Morales, y por ende presentado en sociedad, nos dejó atónitos ver como se presentaba con ese jersey bolivariano, que no digo yo que no debe estar orgulloso de sus costumbres y ¿cultura?, pero hay que saber estar y darse cuenta que cuando uno ha de respresentar a su pueblo a nivel internacional, debe estar a la altura de las circunstancias, y que menos, que saber las reglas de etiqueta y comportamiento. Pero..., seguro que Mister Indígena cree que eso de presentarse en plan individuo del pueblo, demuestra más personalidad que convencionalismos de la sociedad, así que lo raro es que no se decida a salir en los medios la próxima vez vestido con atuendo típico de las tribus indígenas de Bolivia.
Por favor, señores/as, seamos consecuentes con nuestras declaraciones, y más cuando representamos a un país, que por desgracia su población no es muy consciente de su representante, ya que poseen una tasa de analfabetos importante, y estos se dejan llevar por la euforia del momento siempre que su presidente exalte su pueblo y condición bolivariana. Exijamos a los dirigentes de los países que sepan medir sus palabras y que por supuesto acepten que hay países que con un sistema económico basado en el capitalismo, (el sistema más utilizado y que mayores frutos ha dado a la sociedad frente a otros) son más poderosos que otros países que basan su política en ideas populistas y que solo buscan mediante la nacionalización de las empresas contentar a sus conciudadanos, sin que estos sean conscientes que están hipotecando su país a manos de un descerebrado, que solo tiene la cabeza para exhibir su pelo, ya que como dirigente dista mucho que desear.
Como siempre solo he tratado de exponer mi VERDAD que no tiene que ser compartida por nadie, y que por supuesto si ha herido la sensibilidad de alguien, también indicar que mis palabras son de una persona nada influyente, anónima, ya que no ocupo un puesto en un gobierno, frente a las de Evo Morales, que han dado la vuelta al mundo y que por su representación han creado una polémica con muchas personas del mundo, los homosexuales y lesbianas y los calvos. Y es que antes de hablar hay que fijarse en no decir nada que nos deje en evidencia, ya no solo a uno como persona, sino a todo un pueblo como ha sido el caso.
Hasta la próxima:
EL ABUELO.