domingo, 31 de enero de 2010

Cuando un constipado pasa a mayores.

Buenos días a todos/as:
la verdad amigos/as, he estado un tiempo sin poder escribir ya que en primer lugar no tengo mi portátil a mano, ya que lo está utilizando una persona que en estos momentos lo necesita más que yo, pero a finales de mes lo volveré a recuperar. Y en segundo lugar, llevo arrastrando un constipado desde hace cerca de 2 semanas, que en un principio no le di importancia, creí que sería como siempre, un poco de Respir y a vivir que son dos días. Pero hete aquí que la cosa no salió como yo esperaba sino que poco a poco fui empeorando y pasé a preocuparme más ya que el Respir no solo no me hacía efecto, sino que por contra me provocaba más mucosidad.
Llamé al médico por teléfono para comentarle los síntomas que padecía, y éste me recomendó que comprase Fluimucil 600g, que supuestamente debía cortarme los síntomas.
Pasado el día, mi constipado evolucionó a peor, ya que amanecí con un fuerte dolor de cabeza que me impedía siquiera abrir los ojos, así que preocupado hablé con mi madre y esta decidió llamar otra vez al médico para comentarle que ahora sufría fuertes dolores de cabeza. El médico ante los nuevos síntomas decidió mandarme un fuerte medicamento para paliar los dolores de cabeza.
Como siempre todo puede ir a peor, resulta que al día siguiente el dolor era insoportable y decidí ir a urgencias. Allí en urgencias el médico me detectó que de un simple constipado, había pasado a tener una sinusitis bastante fuerte que provocaba que la mucosidad se acumulase y la presión me indujera a los fuertes dolores de cabeza. Me inyectaron en vena un calmante y me realizaron unas radiografías.
El médico me mandó un antibiótico para luchar contra los mocos y la posible infección que estos provocan. La verdad es que he de decir que fue mano de santo, ya que desde ese mismo día, el dolor de cabeza, salvo un momento esporádico, desapareció y mi vida tomo el cariz de normalidad bajo estricto régimen de permanecer en casa pase lo que pase. Incluso he tenido que declinar dos partidos de squash y dejar de estrenar mi cinturón amarillo de kárate.
Pero he de admitir que hasta que no fui a urgencias no di importancia a mi constipado. Pero de todo se aprende y puedo aseguraros, que a partir de ya mismo, cuando tenga un constipado asomando, no lo tomaré a la ligera, sino que sabré valorarlo para evitar que los mocos vuelvan a amargarme la vida como lo han estado haciendo hasta la fecha, que aunque todavía tengo unos pocos, espero que en esta semana me abandonen, no son tan molestos como estos días atrás que me han provocado un quebradero en mis planes, desde atrasar mis temas, hasta evitar avanzar en el maravilloso mundo del kárate.
Espero que esto ayude a muchos otros a valorar en su justa medida los constipados, que por mucho que nos empeñemos los humanos es la enfermedad común que más bajas produce y frente a la cual no hay vacuna posible. ¡Riete de la Gripe A!, la fuerza de los constipados es mayor que la tuya.
Como siempre solo he intentado contar una aventura de mi vida cotidiana, y espero que a partir de ya, puede volver a mantener el ritmo de artículos que quiero, ya que la sociedad está generando infinidad de Verdades que se han de contar.
Hasta la próxima:
EL ABUELO.

No hay comentarios: