Los propósitos de Año Nuevo, ¿se mantienen?.

Buenos días a todos/as:
hoy voy a escribiros en relación al artículo escrito el 5 de enero de este año, en el que comentaba los propósitos de Año Nuevo y las dificultades que presuponía el lograr llevarlos a cabo sin abandonarlos por el camino en el año en transcurso.
Efectivamente, las nuevas intenciones que nos proponemos en general suelen caer en el olvido con el paso de los meses, pero he de reconocer que algunos propósitos, siguen en pie, aunque sea agarrado por los pelos. Pero tiene una explicación lógica que haya algunos propósitos que en determinados meses del año vuelvan a coger fuerza y renazcan de sus cenizas, cuando ya todo el mundo los daba por acabados. Un claro ejemplo es el GIMNASIO.
Efectivamente cuando miramos la vista atrás, vemos que los primeros dos meses de haberte apuntado, has ido regularmente al gimnasio y te sientes orgulloso de ello, pero poco a poco te has ido relajando y olvidando el gimnasio, que solo te acuerdas porque trimestralmente te llega la factura y porque muy de vez en cuando vas a hacer algo en especial.
Cuando ya decides que lo mejor es no perder dinero y desapuntarte del gimnasio, surge que ha llegado el verano y con ello la operación bikini; ¿qué quiere decir esto?
Pues algo tan sencillo como que vuelve a cobrar una importancia excesiva el gimnasio para poder mantener la forma física y así estar "a gusto" en verano contigo mismo.
La verdad señores/as, es que uno tiene que estar a gusto consigo mismo independientemente de que sea verano, o invierno o lo que sea, pero es bien cierto que en verano es cuando uno quiere estar en forma ya que su cuerpo va a ser expuesto con asiduidad a ojos de extraños, y no tan extraños a los que quieres agradar. Y por supuesto en cuando vuelve a cobrar importancia el gimnasio, lugar donde crees que te vas a poner en forma, pero no olvidemos que no solo es ir al gimnasio, sino que también hay que mantener una alimentación adecuada y sobre todo sana. No por el hecho de ir al gimnasio vas a tener un físico excelente, hay que privarse de comidas copiosas y de exceso de grasas.
Por eso, el gimnasio es un propósito de cada año que siempre está en auge, y que lo cumplimos a medias, ya que vamos por impulsos.
Yo particularmente sigo apuntado al gimnasio, pero ultimamente he descuidado mi físico, y he engordado un poquito, pero es que tampoco me ayuda que cuando me pongo a hacer ejercicio, me lesiono muscularmente.
En conclusión, hay propósitos que siguen existiemdo y teniendo razón de ser, ya que la sociedad rige nuestros cánones de belleza y ninguno somos ajenos 100% a ellos. Se mantienen pero no por devoción, sino por oblñigación.
Espero que nadie se sienta ofendido con mi artículo.
Hasta la próxima:
EL ABUELO.