España va bien... ¡deportivamente!

Buenas tardes a todos/as:
ayer las imagenes de Mariano Rajoy botando en el Olimpiski de Ucrania, daba a entender la gran felicidad que el pueblo español sentía; pero no por saber que el crédito al final no será computado como deuda pública, ni porque España haya rebajado el paro, (ojalá), ni tan siquiera porque la crisis económica que azota a todo el mundo este alcanzando su fin, no..., Rajoy botaba de alegría porque como decía su antedecesor Aznar, España va bien, pero en lo deportivo.
Exacto el señor Rajoy estaba contento por ver como la selección española, La Roja, aplastaba por 4-0 a Italia, y así al menos durante los 90 minutos que duró el partido y pensando en la celebración posterior en España, los problemas de los españoles desaparecerán para vivir unas frágiles e inciertas horas de alegría que supondrán un respiro al gobierno de la Nación, ya que al menos durante 48 horas los telediarios no hablarán en primera página de la prima de riesgo, sino que encumbrarán a héroes a los componentes del combinado nacional, que han logrado entrar en la leyenda de la historia del fútbol, al ser la única selección que ha conseguido encadenar una Eurocopa 2008, un Mundial, 2010 y la acabada Eurocopa 2012. Es efectivamente la única selección que lo ha logrado en el historia. Además de lograrlo, ha conseguido que nuestro fútbol sea la envidia de los demás países y sea la referencia a imitar.
Pero lo mejor de todo es que no solo los éxitos de La Roja engrandecen la patria, sino que también tenemos otros deportistas y otros deportes que ponen en el disparadero a nuestro país, y como mejor ejemplo tenemos el tenis español, en su máxima representación Rafael Nadal, que se ha proclamado este año, como ganador del torneo francés Roland Garros, uno de los grandes eslams, por séptima vez, superando ya a Bjon Borg, que hasta este año ostentaba el récord con 6. Pero Rafa, logró lo imposible ganando en la final al número uno actual Novak Djokovic.
Cierto es que ahora en el torneo británico y más antiguo por excelencia Wimbledon, ha sido eliminado en segunda ronda por el número 100 de la ATP. Pero bueno... ¡errar es de humanos! Además Nadal tiene ahora la posibilidad de resarcirse de dicha derrota también en las pistas del All England Club, ganando las olimpiadas que se juegan este próximo verano, además con el orgullo de ser el abanderado de los olimpistas españoles.
Pero aquí no acaban nuestros éxitos deportivos, ya que tenemos el honor de contar con el líder de uno de los deportes que más dinero generan en el mundo, nos referimos a La Formula 1, en la que nuestro español, bicampeón mundial, Fernando Alonso, al mando de su Ferrari, lidera el campeonato con una distancia de 20 puntos sobre el segundo. Además tiene el honor de ser el único piloto que en las carreras disputadas hasta el momento, 8, ha estado siempre en los puntos y no ha tenido que abandonar en este año.
Así que parece que Ferrari al fin en su tercer año ha conseguido construir un monoplaza que aunque no es el más rápido, si que se está mostrando competitivo y sobre todo fiable para que Alonso alcance por tercera vez en su vida el campeonato de Formula 1, pasando así a la historia de dicho deporte, pero muy lejano de Michael Shumacher que ha ganado 7 veces el campeonato; pero Alonso siendo tricampeón entraría entre los grandes.
Pero es que además de los deportes anteriormente citados, tenemos que tener muy en cuenta a la selección de baloncesto, la otra Roja, que posiblemente de la mano de Gasol, Navarro y compañía, estarán luchando por el oro olímpico, ya que no debemos olvidar que son los actuales campeones de Europa.
En definitiva que España va bien, efectivamente en cuanto a temas deportivos se refiere; pero eso no se extrapola a nivel económico y de estabilidad que es lo que realmente necesita la población española. Pero mientras llegamos a dicha confianza bien nos vale ilusionarnos con los éxitos deportivos que nos hacen olvidar por unos momentos la cruda e inevitable realidad que nos toca vivir.
Gracias al deporte por ser una vía de escape, ya sea viéndolo, ya sea practicándolo.
Como siempre solo he tratado de contar mi Verdad.
Hasta la próxima:
EL ABUELO.