¿La España del cambio?

Buenas tardes a todos/as:
el pasado día 20 de diciembre, domingo fueron las elecciones al parlamento y al senado en España, lo que es lo mismo que decir elecciones generales. Los españoles estaban llamados a las urnas para según todas las encuestas cambiar la situación política en la que estamos inmersos, ya que de un sistema bipartidista, íbamos a pasar a un sistema plural en el que nuevas y emergentes fuerzas políticas tendrían mucho peso en el panorama político español.
A la hora de la verdad, se ha demostrado que en España, seguimos con una porcentaje de votación baja, por mucho que sea lo que nos juguemos a nivel político y a nivel económico; y que si bien es cierto que PP y PSOE han perdido votos considerablemente, PP perdió la mayoría absoluta y se quedó en 122 escaños, mientras PSOE ha sacado 90 escaños, peor resultado de su historia con su líder Pedro Sánchez, aún así estos partidos siguen siendo los mayoritarios y Podemos y Ciudadanos han surgido con fuerza 69 y 40 escaños respectivamente pero no han conseguido desbancar a los dos partidos principales.
La verdad es que la llamada España del cambio sí que existe y ello es debido a que los grandes líderes de los partidos, que en un principio han dicho por activa y por pasiva que no iban a pactar y que pretendían gobernar en solitario, a la hora de la verdad, sí que están decididos a hacer cambios en su política de pactos para así poder aferrarse al poder de una forma u otra.
Pedro Sánchez el líder del PSOE que según sus propias palabras, si no ganaba las elecciones sería un fracaso, como así ha sido, dijo en campaña que no pactaría nuca con Podemos, ni con los nacionalistas, ya que la unidad de España era inamovible. Y ahora a la hora de la verdad, en vez de reconocer su fracaso y dimitir, se aferra al poder y está dispuesto a pactar con Podemos y los nacionalistas con tal de echar de la Moncloa a Rajoy. La verdad es que de los dichos de precampaña a la realidad hay un buen trecho y Sánchez ha quedado retratado como el perdedor con ansias de gobernar incluso vendiendo su alma.
Pablo Iglesias, el fundador y líder de Podemos, ha asimilado muy positivamente sus 69 escaños, casi podríamos decir que se le ha subido a la cabeza y se cree que es el único legitimado para gobernar por mucho que la mayoría necesaria sean 176 escaños. Incluso ya habla como si él tuviese la llave de la Moncloa y en breve vaya a hacer uso de ella. Alguien le tendría que decir a Iglesias, que necesita de apoyos, y con los nacionalistas no le llegan, así que o pacta con Ciudadanos, o no gobernará, ya que según dijo en su campaña, nunca pactaría con la casta y con aquellos partidos caducos que necesitan dejar paso a la savia nueva. A la hora de la verdad, ya ha tendido puentes para pactar con el PSOE, ya sea por mediación de Pedro Sánchez, de Pagés o de Susana Díaz. Vamos, otro que con tal de gobernar, defraudará a sus votantes no cumpliendo su palabra de no pactar con los 2 grandes partidos de España.
Albert Rivera, líder y fundador de Ciudadanos. La verdad es que de Rivera solo podemos decir que antes de las elecciones siempre dijo que dejaría gobernar a la lista más votada, que en este caso ha sido el PP, pero que no apoyaría una investidura de Rajoy, pero que tampoco la vetaría, sino que se abstendrán en la votación de formación de gobierno. También ha dejado dicho por activa y por pasiva que nunca pactaría con ningún partido que ponga en juego la unidad de España, con lo que es inviable que lo haga con Podemos, (partidarios de libre determinación de Cataluña), no con los nacionalistas. Y por si queda alguna duda también ha dicho que no pactará con PSOE y PP, ya que ambos partidos tienen presuntos implicados en corrupción y no quiere relacionarse con este problema. Sinceramente creemos que es el candidato que menos se ha movido de su postura inicial y llama la atención que se mantenga firme , (de momento), en sus ideas.
Mariano Rajoy; el líder del PP, es el ganador de las elecciones, pero como han perdido la mayoría absoluta que poseían hasta el momento, se ve forzado a buscar pactos con los demás partidos para no verse abocado a gobernar en minoría, (algo poco probable, ya que PSOE y Podemos ya han dicho que no van a votar la investidura), o para no verse fuera de la Moncloa, en caso que Podemos y PSOE y los nacionalistas se unan, ya que en ese caso, Rajoy se vería obligado a abandonar la Moncloa y el PP ya no sería el partido del gobierno, sería oposición.
Debido a esta tesitura, Rajoy ha comenzado a tomar contacto con los líderes de los demás partidos, incluso del PSOE, (esa coalición se nos antoja imposible), para poder formar gobierno.
Si dentro de 2 meses no se llega a ningún acuerdo de gobierno, España se verá obligada a volver a convocar elecciones y esperar que esta vez si haya un partido mayoritario o un pacto de gobierno. Y ello además conlleva que haya inestabilidad política, que redunda en la economía del país, y en el funcionamiento de las administraciones públicas.
La verdad, España se juega mucho en estos 3 meses que vienen y mucho nos tememos que esta inestabilidad va a perjudicar a los intereses de nuestro país. De hecho la bolsa ya ha perdido puntos y la prima de riesgo ha subido. Pero... ¡así somos los españoles!
Hasta la próxima:
EL ABUELO.